¿Cómo estimular la atención en los niños?
Cada actividad que realizan los niños implica un mínimo de atención. Debemos tener en cuenta que está capacidad no surge de manera espontánea, no es voluntaria, sino que debe estimularse a lo largo de su desarrollo, por eso es importante ayudar a nuestros peques a adquirir una buena capacidad de atención, ya que esto le ayudará en su desarrollo cognitivo. En este artículo podrás aprender a estimular la atención en los niños.
Durante los primeros meses de vida los pequeños manifiestan la atención respondiendo a estímulos, sonidos, de una manera involuntaria, por eso se distraen con mucha facilidad. Es entre el año y los dos años cuando pueden mantener la atención durante más tiempo de manera voluntaria, aunque todavía siguen
distrayéndose. En la Escuela Infantil el Valle, tenemos en cuenta el tiempo que nuestros peques pueden estar concentrados en una actividad, por lo que las organizamos y programamos en base a eso, para asegurarnos que ese tiempo es de calidad.
Queremos informaros y aconsejaros sobre que podéis hacer en casa para ayudar a desarrollar esta capacidad.
Lo primero es saber que los niños de 1 año pueden estar concentrados en una actividad entre 1 y 5 minutos y los peques de 2 años, de 4 a 10 minutos, por supuesto esto es orientativo, y lo iremos conociendo en el proceso de estimulación.
Ahora vamos con los consejos; lo más importante es saber en que momento del día nuestro peque está más tranquilo y receptivo, para así conseguir captar su atención de una manera positiva y buscar un lugar en el que los estímulos visuales y los sonidos no interfieran en la actividad.
A continuación, empezaremos a utilizar las herramientas, que no son otras que el juego, ya que este nos brinda un abanico muy grande de posibilidades, desde los puzles, los cuentos, las fichas de construcción hasta los juegos de cucú-tras y jugar a esconder animales, hay un sinfín de juegos que implican poco tiempo en los que nos aseguramos la atención de nuestro peque.
También, las rutinas y los hábitos son una buena herramienta para trabajar la atención, ya que irán afianzando durante el día las rutinas y tareas a desarrollar.
Por último, tener muy presente que lo más importante es tener paciencia y acompañar a nuestro peque en su desarrollo, sin prisas y con una actitud positiva.
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